sábado, 13 de abril de 2013

Jaleo malagueño para cantar la caña, 1840

La relación entre cañas y polos con Málaga se remonta según los datos que tenemos a aquel polo de Ronda, al polo nominado de Tobalo, a la idéntica salida del polo natural y la llamada rondeña malagueña ('Carmona tiene un fuente' vs 'Navegando me perdí'). Algo podría haber tenido que ver la estancia de Antonio Monge El Planeta en Málaga desde 1836, amén de otras curiosidades como la bellísima jabera del Negro que, con letra clásica de caña, registró El Mochuelo en 1907.


El aire de jaleo fue contagiando a todo el que a él se arrimaba, cañas y polos no fueron menos y en 1840 en Málaga parece que ya se practicaba la 'moda' de jalear la caña. El dramaturgo malagueño Tomás Rodríguez Rubí publicó en 1840 (25 y 31 de mayo) bajo el título Costumbres andaluzas un pequeño relato donde menciona un jaleo de aquellos buenos de Málaga... tocado por un tal Lucas Moreno que con dulce voz entonó una tiernísima caña. Ficción o realidad ahí están los nombres, los estilos y sus variantes. Más madera para el tema jaleo-soleá, donde vuelve a aparecer Málaga, la cantaora.


Semanario Pintoresco Español 24/5/1840

Algún parecido tuvo que tener con este Jaleo de Málaga que se bailaron Sojuela y Guerrero en 1859 en Valencia dentro de la obra El Perchel de Málaga, con rondeña, zapateado, guaracha y soledad por los mismos y toda la sección del cuerpo de baile

Gran función para el miércoles 30 de noviembre de 1859