A Manuel Bohórquez
Alfred Dehodencq: Baile de gitanos en el Alcazar de Sevilla |
Imagino que será la caña jaleada que medio siglo después comenzará a florecer por soleá en múltiples variantes, espejo en el que se miró el polo nominado de Tobalo.
El Zurriago, Madrid, número intermedio. 1822, n.º 2 |
Bonita entrada maestro. ¡Ya echábamos de menos tus "afines". Un abrazo.
ResponderEliminarInteresante, y curioso lo de la gazapera. Un abrazo
EliminarMuy bien repartíos los papeles. Y el descubrimiento personal de que ya hace casi dos siglos había "seguratas" como Pineti, armaos, para que los estamentos disfrutaran de sus jaranas. De toda la vida se han montado bien sus garatas. Salud.
ResponderEliminarSalud Ana, ya ves que el cuadro estaba completito
EliminarMuy sabrosa la noticia, me ha encantado. Es la primera vez que me topo con la.gazapera de nuestro amigo Manolo convertida en otro palo perdido. Seguro que hay más ejemplos. Saludos.
ResponderEliminarHabrá que seguir buscando, yo la encontré de casualidad rastreando cañitas. Saludos
Eliminar¡Olé, Faustino! La Enciclopedia Bloguera del Flamenco, no ni ná...
Eliminar¡Qué arte tienes! Sobre todo, una maravillosa , ardua y dignísima afición que nos transmite a tus fieles seguidores...
Abracetes.
Mari Carmen.