sábado, 23 de enero de 2010

Cuando las tonás se tocaban a guitarra

Hubo un tiempo en que toná era sinónimo de melodía, tonada al fin y al cabo, estuviese o no acompañada de guitarra, y si no lean este fragmento de la zarzuela en un acto 'Un sevillano en La Habana' de Leopoldo Palomino y música de Isidoro Hernández, estrenada con éxito en el teatro del Buen Retiro de Madrid el 2 de julio de 1871. En un diálogo entre los personajes Tomás y Curro se puede leer:
Curro - Muchachos, veni pa cá
y templar esas sonantas,
y a lucir esas gargantas
con un güena toná;
que habita en estos locales,
causándole envidia ar Só,
la reina, lo digo yo,
de las mujeres juncales.
Tomás: ¿Qué cantamos?
Curro: Un jaleo, y a luego una soleá o cuarquiera otra toná.
Tomás: Vaya pues que es su deseo.
Y cantan
La toná es pues en 1871 para muchos cualquier cante, aquí una soleá acompañada de sonanta.
Gracias por los comentarios.

1 comentario:

  1. Sigo tu blog con gran interés, amigo Faustino. Nos hacía mucha falta.
    No desfallezcas.

    Manuel Bohórquez

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