La noticia que traemos hoy se refiere de nuevo a Trinidad Huertas y al tratamiento que por lo visto desde siempre han tenido los artistas españoles entre sus paisanos. Sin duda el refrán 'nadie es profeta en su tierra' es de por aquí. 'El Tío Camorra, periódico político y de trueno, la verdad por boca de cotorra que no es lo mismo que por boca de ganso' del día 15 de septiembre de 1847 hace hincapié en cómo no se acepta a Huertas por español mientras se aplaude a los 'inis' que llenaban los teatros. Ya lo decía la tonadilla de Blas de Laserna: La operista y el cómico, de 1784: ‘Yo he visto venir a España operistas sin zapatos, y después se ha vuelto a Italia con un coche de caballos.’ La desgracia del guitarrista valenciano fue no llamarse Huertini y poder ser entonces comparado con el mismo Paganini. Las seguidillas rasgueadas y el punto de La Habana también se incluyen en su repertorio. Pronto informaremos más sobre el tan traído y llevado punto de la Habana, vulgo guajira.