El segundo viaje de Lázaro a Madrid (que sepamos) le llevó a trabajar en el señero Teatro de la Cruz, el más importante coliseo madrileño en 1848, y el más antiguo de los que entonces se mantenían en pié, junto con el Príncipe (ese año se convertiría en el actual Español). En los primeros meses de 1849 empezaría la decadencia de este teatro que había estado abierto desde el siglo XVI como corral de comedias, siendo demolido definitivamente en febrero de 1859 (en sus tablas la música más popular vivía coleando; su escenario, cazuela y patio configurarán los ingredientes con los que más tarde se cocinará buena parte de la estética musical del flamenco).
La actuación de Lázaro fue brevemente comentada en el diario El Popular del día 14 de diciembre.
El Popular 14/12/1848 |